«Quejarse no sirve de nada y menos apelar a la compasión. Nadie va mover un dedo por restaurar una justicia en la que nadie cree, nadie va a ayudarnos porque nadie admira al caído. Por más que nos duela, no queda otra que encontrar una salida.»
El libro del destino I
Publicado en Miscelánea
Comentarios